El presidente Gustavo Petro ha apelado a varias movilizaciones desde el principio de su Gobierno, y este martes, a pocos días de comenzar su tercer año, ha hecho un llamado más: invitó a millones de adultos mayores que viven en la pobreza para que acudan a la Plaza de Bolívar. Allí, en el centro de Bogotá, Petro espera firmar y celebrar la reforma pensional, aprobada hace un mes en el Congreso de la República. Esta ha sido su única gran victoria legislativa en temas sociales. La marcha de los adultos mayores es un primer símbolo del presidente para argumentar que detrás de las reformas que vienen —educación, salud, agraria, judicial, servicios públicos— hay un escudo popular. El evento, en el que participarán Gloria Inés Ramírez, la ministra de trabajo, y Jaime Dussán, el presidente de la empresa pública Colpensiones, también será un termómetro para medir qué tan masivo se mantiene su apoyo popular. Después vendrán más movilizaciones. Petro ya anunció otra marcha para el próximo 20 de julio, cuando se inaugura el tercer año del Congreso, con campesinos que llegarán a apoyar la reforma agraria, y otra más en defensa de las reformas sociales para el próximo 7 de agosto, cuando se cumplen los dos años de Gobierno.
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